«Según el último estudio elaborado por el Fondo Monetario Internacional, la economía sumergida en España representó un 17,2% del producto interior bruto (PIB) en 2017. Es decir, más del 17% del dinero que se mueve en el país es en B.»
Si permitimos que siga circulando dinero libre de impuestos estamos poniendo en riesgo nuestro estado de bienestar. La sanidad, la educación o los servicios sociales, entre otras prestaciones, dependen de los impuestos que van adjuntos al pago de un servicio por parte de un profesional que está dentro de la legalidad.
Que siga existiendo es cosa de todos.
Contra la economía sumergida, ¡mójate!