La nueva entidad podría llamarse Banco Castilla-La Mancha o simplemente CCM
El director general de Caja Castilla La Mancha (CCM), Gorka Barrondo, planteó ayer que en el proceso de integración de la entidad con Cajastur hay muchas más garantías de que se mantenga el empleo de los trabajadores de CCM que el suyo propio y el del director general del Grupo CCM, Xabier Alkorta.
Ambos comparecieron ayer ante la prensa para explicar los pormenores del proceso de integración en Cajastur iniciado el miércoles, con una reunión en Madrid entre las direcciones de ambas entidades, además de otra del comité de dirección de CCM y una más con los representantes de los trabajadores.
Barrondo explicó que el mantenimiento de la masa laboral y de los derechos de los trabajadores será una de las prioridades «sino la principal» durante la negociación, y ha dado mucha menos importancia a su futuro y al de Alkorta. En este sentido, aseguró que no tienen «ninguna promesa ni ninguna garantía», es más, que ni siquiera han preguntado qué va a pasar con ellos.
Del equipo directivo
Barrondo, que ya formaba parte del equipo directivo de CCM, fue nombrado director general después de que el Banco de España interviniera la entidad el pasado marzo, mientras que Alkorta fue nombrado por el Banco de España cuando estaba recién jubilado como director general de la guipuzcoana Kutxa.
Ambos han diseñado en los últimos meses el Plan Tajo, un proyecto plurianual para el futuro de CCM (aprobado en la última Asamblea de la Caja) que respeta la actual masa laboral -de más de 2.500 trabajadores- y que, según Alkorta, debe ser la base sobre la que trabaje el banco en el que se integrará el negocio financiero de CCM.
De otro lado, los directivos indicaron que el proceso de integración tendrá su «complejidad» y estará «abierto a múltiples cambios jurídicos y legislativos», pero «no es una amenaza» para la caja y sí «una oportunidad».
Fórmula novedosa
Así, Barrondo explicó que la propuesta de Cajastur, que consiste en la integración de las dos cajas mediante el banco Liberta, es «novedosa» y está avalada por el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD).
Añadió al respecto que este proceso de integración se llevará a cabo a través de la cesión de activos y pasivos al citado banco, la filial de Cajastur, que adoptará la marca de CCM, aunque no se descarta el nombre de Banco Castilla-La Mancha y a Cajastur también aportará capital.
Según dijo Barrondo, el banco Liberta, que tendrá su sede en Castilla-La Mancha, estará participado en un 25 por ciento por CCM y el 75 por ciento restante por la caja asturiana. Matizó que pese a esta estructura de integración, CCM que seguirá con su sede en la región, mantendrá su independencia, sus inversiones de corporación y financieras, además del 25 por ciento del capital del banco y su Obra Social.
No obstante, Barrondo descartó que esta propuesta signifique la creación de «un banco bueno y un banco malo», es decir, que la caja se vaya a quedar con los activos deteriorados y el banco con los «apetecibles». El banco, que será propiedad de las dos cajas, contará con un «esquema de protección de activos» -con un importe que no quisieron precisar-, que funcionará como un seguro para garantizar que la entidad financiera no tenga perdidas desde 2010, en conclusión «una herramienta de apoyo e inyección de capital indirecta», matizó Barrondo.
Fondo de Garantía
El Fondo de Garantía de Depósitos aportará al banco 1.300 millones de euros (que fueron adquiridos por el FGD cuando CCM fue intervenida) repartidos en cuotas participativas por un valor de 900 millones de euros y participaciones preferentes, por 400 millones de euros. Por su parte, el director general del Grupo Caja Castilla-La Mancha (CCM), Xabier Alkorta, señaló que tienen «un buen socio» y ésta era «la mejor opción posible», por lo que advirtió, en referencia a la Asamblea General de la caja, de que quien no lo respalde «tendrá que asumir las consecuencias».
El Banco de España anunció el pasado 3 de noviembre la aprobación del proyecto propuesto por la CCM para su integración con Cajastur, por ser el plan «que mejor cumple los criterios de solidez y racionalidad económica y financiera» y además respeta el objetivo de no suponer un coste para el erario público.
Además de Cajastur, BBK presentó una oferta para hacerse con CCM, una acción que Alkorta agradeció a la caja vasca por «su apuesta por el futuro» con la entidad.
Fuente: laverdad.es