La quiebra de la firma SEOP se lleva por delante una ferrallista de Albacete
Los anunciados efectos de la crisis de las empresas constructoras ya están aquí: trabajadores e industrial de ferralla y aluminio son los grandes afectados de una coyuntura económica con varias causas. La Cámara de Comercio está preparando un informe donde se detalla el alcance en la provincia de lo que algunos llaman «desaceleración» y otros llaman «crisis». Con crisis o sin crisis, el freno de la actividad del sector y la falta de liquidez de las grandes sociedades tienen ya los primeros damnificados: la empresa albaceteña Ferromontajes Ruiz ha solicitado un concurso de acreedores -la conocida suspensión de pagos- motivado por el impago de clientes, endurecimiento de los sistemas financieros, y principalmente la quiebra el pasado mes de marzo de uno de sus grandes clientes, SEOP Obras y Proyectos.
Ferromontajes Ruiz, ubicada en Campollano y con cerca de 40 trabajadores en la capital (más otros 50 en Madrid), solicitó el concurso ante el Juzgado de lo Mercantil de Albacete, tal y como confirmó el vicepresidente de la Cámara de Comercio, Antonio Atienzar, que indicó cómo «la caída de una gran empresa se lleva por delante a las subcontratadas». La situación se amplifica a otras empresas de ferralla y auxiliares del sector de la construcción. Fuentes sindicales confirmaron ayer un Expediente de Regulación de Empleo en la firma Hermanos Romero Ródenas S.L. , ferralla ubicada en el polígono de Camporroso, que ha solicitado extinguir los contratos de alrededor de un 30% de la plantilla. Ángel León, secretario de la Federación del Metal de CCOO, indicó cómo la firma de aluminio Extrual ha eliminado el trabajo temporal, quitando un turno de trabajo.
Fuera de tiempo
Fuera de tiempo
La decisión del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero de adelantar todas las inversiones en infraestructura y obra pública se antoja una posible solución para paliar el efecto de la crisis, aunque el tiempo que requiere el proceso administrativo hará que inevitablemente haya efectos negativos en la actividad empresarial y en puestos de trabajo. El Gobierno regional ha adelantado también la licitación de construcción de obra pública por más de 565 millones de euros en este primer trimestre, aunque de aquí a que las empresas entren a trabajar en dichas obras pasará un tiempo que puede ser «peligroso» para muchas pequeñas empresas de la provincia albaceteña.
Así lo afirmaba ayer el vicepresidente de la Cámara de Comercio, Antonio Atienzar, que indicó cómo «sacar adelante la licitación está bien, pero falta que salga la obra y empiece a moverse, porque la licitación no es inmediata». Junto a esta promoción de la obra pública el sector de industrias auxiliares va a necesitar más apoyos, como refrendó Atienza: «No es sólo ese punto el que hay que mejorar». De hecho, caídas como la de Ferromontajes Ruiz no están relacionadas con una falta de actividad, sino con la originaria imposibilidad de hacer frente a los pagos que tiene uno de sus principales clientes, SEOP, acogido al concurso de acreedores. Ante esta realidad, con el endurecimiento del sistema financiero, poco puede remediar el adelanto de la construcción de infraestructuras públicas.
Fuente: La Tribuna de Albacete