Los agentes sociales han emitido una declaración conjunta
En los últimos años se ha producido un importante aumento de los extranjeros en España. Tal hecho constituye actualmente uno de los asuntos a los que la sociedad española es más sensible, en especial porque una parte de ellos son empleados por empresas que no declaran su trabajo.
El trabajo irregular tiene unos negativos efectos para el inmigrante, que con frecuencia es sometido a abusos, por la situación de indefensión en que se encuentra. También para el trabajador, pues uno de los efectos del empleo ilegal de aquél es contribuir a la pervivencia de una economía paralela que tiende a reducir en general los salarios y demás condiciones de trabajo a un nivel inferior a los reconocidos en la legislación y en los convenios colectivos. Para el empresario que contrata legalmente supone una competencia desleal. Y finalmente para el conjunto de la sociedad española el trabajo no declarado no contribuye a financiar a la Hacienda Pública ni al sistema de la Seguridad Social, de modo que el empresario infractor traslada parte de sus costes a los demás ciudadanos.
El control de la economía irregular y del trabajo de los extranjeros es una prioridad de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, y supone una importante parte de su actuación programada. No obstante, se ha detectado que en los sectores de actividad y áreas geográficas donde la actuación inspectora se ha intensificado, por acumular un mayor volumen de trabajo no declarado, se ha ido creando un clima de creciente oposición a su actuación, que se ha traducido en un aumento de las obstrucciones a su labor, amenazas e incluso violencia, tal y como ocurrió el pasado 29 de mayo de 2008 en una empresa del Polígono Industrial Campollano.
Conscientes de ello, la confederación de Empresarios de Albacete y las Organizaciones Sindicales de CC.OO y UGT, como resultado de la reunión mantenida el día 9 de junio de 2008, han acordado efectuar la declaración siguiente:
1. Mostrar su apoyo a la actuación que los funcionarios de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social deben desarrollar y desarrollan para el control de la economía irregular y del trabajo de los extranjeros.
2. Condenar de forma tajante todo tipo de coacción y violencia de quienes con su conducta pretenden impedir su actuación, y con ello mantener la situación de abuso sobre los inmigrantes, perjudicar a los trabajadores en general y a los empresarios que legalmente les contratan.
3. Solicitar de las Administraciones Públicas la adopción de medidas de apoyo a las actuaciones inspectoras.
4. Difundir esta declaración entre sus organizaciones sectoriales y territoriales para conocimiento y apoyo de la misma.