Barreda: "No hay agua para todos y habrá menos en el futuro"
El presidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, ha defendido hoy en el Congreso el nuevo Estatuto que quiere para su comunidad, un texto cuyo interés se centra en la disposición que fija el fin del trasvase Tajo-Segura para el año 2015, una decisión que ha levantado las protestas en la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia. "No hay agua para todos ni para todo, y habrá menos en el futuro", ha sentenciado el presidente castellano-manchego.
La sesión en el Congreso de toma en consideración del Estatuto para Castilla-La Mancha se ha iniciado con un hemiciclo semivacío en el que no estaba el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y con la asistencia de la presidenta del PP en Castilla-La Mancha, María Dolores de Cospedal. Éste es el primer trámite parlamentario de esta cuarta reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha -tras las que se hicieron en 1991, 1994 y 1997- y se produce más de veinte meses después de que fuera aprobado por unanimidad en el Parlamento regional, el 29 de enero de 2007. El texto cuenta con el consenso del PSOE y del PP de Castilla-La Mancha, los dos partidos con representación parlamentaria en las Cortes regionales, que lo elaboraron y votaron conjuntamente.
Barreda ha mostrado su disposición al acuerdo pero ha advertido de que si resulta "devaluado" o "modificado sustancialmente" pedirá su retirada. El objetivo del Estatuto es terminar con un trasvase "ineficaz, inservible y obsoleto a medio y largo plazo".
En su discurso, Barreda ha atribuido al cambio climático la situación que obliga a su comunidad a no mandar más agua a la Comunidad Valenciana y a Murcia. Además, "nuestra toponimia remite a lo seco", ha dicho Barreda, incluso el nombre de La Mancha, "que significa seca", y "la comarca de la Sagra, una palabra cuya raíz es igual que la de Sáhara", un ejemplo que le ha llevado a decir que "hay años que llueve menos en algunas zonas de Castilla-La Mancha que en ese desierto" africano. "No somos insolidarios pero la cuenca que cede agua tiene prioridad", además esta comunidad "no tiene mar, ni agua que desalar", en alusión a las que reciben el agua del Tajo.
El presidente de los castellanomanchegos ha cifrado en "10.000" los hectómetros cúbicos enviados desde el Tajo al seco Segura y para que todo el mundo se haga una idea ha puesto este ejemplo: "Un hectómetro es el estadio Bernabéu lleno hasta su última tribuna". En su opinión este trasvase ha tenido "un efecto de demanda creciente". El mensaje final de su intervención ha sido: "No podemos aceptar que la escasez de agua limite nuestro desarrollo", así que se necesita "otra cultura del agua". Si, como esta previsto, el Congreso da luz verde al texto, comenzará la discusión artículo por artículo del Estatuto.
Antes de la intervención de Barreda han tomado la palabra los diputados regionales José Molina (PSOE) y Leandro Esteban (PP), quienes han coincidido en que el texto estatutario no se plantea contra nadie ni contra ningún territorio.
"No me conformo con cualquier cosa"
Por la mañana, el presidente de Castilla-La Mancha ya había explicado en una entrevista en la cadena SER la posición de su Gobierno sobre el trasvase del Tajo y aseguró que no se iba a conformar "con cualquier cosa". "Si los intereses de mi región no quedan preservados yo tomaré las decisiones que correspondan", dijo.
El punto más destacado de los 170 artículos es en el que se pide que el volumen de agua trasvasable desde el Tajo al Segura se reduzca progresivamente a partir de la entrada en vigor del Estatuto hasta su definitiva extinción, que "en todo caso se producirá en 2015, coincidiendo con el plazo establecido para el cumplimiento de los objetivos medioambientales y los plazos referidos al buen estado ecológico de la aguas superficiales establecidos por la Directiva Marco de Aguas".
La reforma llega a la Cámara Baja con posiciones opuestas entre los diputados nacionales castellano-manchegos y los de las comunidades valenciana y murciana sobre la disposición transitoria primera del texto. Sin embargo, tras varios días de negociaciones, el PSOE y el PP han convencido a sus diputados de Valencia y Murcia para que apoyen la toma en consideración del proyecto.
De la Vega: "Que el Estatuto se acomode a la Constitución"
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, ha considerado hoy legítimo que Castilla-La Mancha formule su interpretación sobre el reparto de competencias en materia de agua, pero ha recordado que las Cortes deben adecuar ese planteamiento al proyecto común de toda España. Así lo ha señalado en su intervención ante el pleno del Congreso que debate el nuevo Estatuto de Castilla-La Mancha, la única reforma que llega al Parlamento con el voto unánime de las fuerzas políticas autonómicas. De la Vega ha instado al Congreso a apoyar la toma en consideración y a comenzar a debatirla para acomodar el texto a la Constitución.
Fuente: elpais.es