FEDA pide sensibilidad en la aplicación de la Directiva Europea de Servicios
Durante el I Encuentro Temático sobre “La directiva de Servicios: El comercio y la ordenación del territorio” celebrado en Albacete y organizado por Global Encuentros, la vicepresidenta y consejera de Economía y Hacienda, María Luisa Araújo, ha resaltado que “el Gobierno de Castilla-La Mancha apuesta por impulsar el comercio como sector estratégico en la actividad económica regional”.
En la clausura de este Encuentro también estuvo presente el presidente de FEDA, Artemio Pérez, quien destacó, para empezar, que el sector servicios, incluido el comercio, representa el 70% de la riqueza que se produce en nuestra provincia e igual porcentaje en el empleo. Por tanto, es el más importante y el que ha experimentado un mayor desarrollo en los últimos años.
En su intervención, Araújo ha recordado que en este sector, durante el tercer trimestre de 2008, el número de trabajadores ocupados alcanzaba la cifra de 120.103 personas, lo que supone el 14,9 por ciento del total de ocupados en la región.
La vicepresidenta económica ha repasado en la clausura de estas jornadas, la Directiva de Servicios, más conocida como Directiva Bolkestein, que determina una serie de criterios para el buen funcionamiento de la libre circulación servicios y garantiza la libertad de establecimientos en los Estados de la UE.
En este sentido, ha explicado que el Gobierno regional está trabajando en una nueva regulación de comercio que en los próximos días saldrá a información pública para que los agentes económicos y sociales realicen sus aportaciones al documento.
El plazo de transposición para adaptar la legislación europea a cada país finaliza el 28 de diciembre de este año. Asimismo se ha referido a que la Directiva Europea supone también una oportunidad para simplificar y revisar trámites que a veces nos impiden ser más competitivos.
En cualquier caso, ha destacado que para el Gobierno de Castilla-La Mancha el comercio es un sector estratégico y que su distribución ha cambiado dando paso a la coexistencia de grandes organizaciones comerciales con pequeños comercios que se han encontrado en la necesidad de reorientar sus estrategias y buscar nuevas alternativas para mejorar su competitividad.
Plan de Apoyo y Fomento del Pequeño Comercio 2009-20012
Araújo también recordó que el Gobierno de José María Barreda tiene establecidas una serie de ayudas como la convocatoria de líneas de Incentivos a la Inversión Empresarial, la mejora a la competitividad, para la modernización de la pequeña y mediana empresa, y subvenciones en materia de promoción comercial, así como ayudas en materia de urbanismo comercial para los ayuntamientos.
Además, ha indicado que está en elaboración el Plan de Apoyo y Fomento al Pequeño Comercio 2009-2012 que podría estar aprobado en las próximas semanas, y se está diseñando la nueva Ley de Comercio conjuntamente con la Confederación Regional de Comercio, que preside Lorenzo López Giménez, presidente también de la Federación de Comercio de Albacete.
Defender que no proteger
Por su parte, el presidente de FEDA transmitió a la vicepresidenta la confianza de los empresarios “en cuanto a la sensibilidad de nuestro Gobierno regional, en cuanto a defender, que no es lo mismo que proteger, a nuestro comercio y nuestro sector servicios. Y, evidentemente, la Federación de Comercio, de la mano de la Confederación Regional, no bajará la guardia y estará vigilante en el resultado final de la transposición de esta Directiva Europea”.
“Evidentemente –dijo Artemio Pérez-, ya en el siglo XXI, FEDA y, por tanto los empresarios, no nos vamos a oponer a la economía de libre mercado y a la libre circulación de mercancías y ciudadanos, pero sí pedimos que la Administración haga todo lo posible para que la aplicación de la directiva tenga el menor impacto posible en nuestro comercio y sector servicios”.
Equilibrio entre el centro urbano y la periferia
La Directiva de Servicios propone alcanzar un auténtico mercado único de servicios a través de la eliminación de barreras legales y administrativas en aras de la libertad de establecimiento y la libertad de circulación. La preocupación del pequeño comercio es a qué precio y qué va a pasar con las medidas de protección de este sector tan debilitado en la situación actual.
Con la nueva Ley, la instalación de grandes establecimientos estará sujeta a una única autorización que otorgará la administración autonómica o local. Se sustituyen los criterios económicos por requisitos basados en razones imperiosas de interés general, y se establece la duración ilimitada de las autorizaciones y el silencio administrativo positivo a la hora de otorgarlas.
La eliminación de estas trabas ha sido muy bien acogida por el sector que ve como se abren más puertas para ejercer su actividad y ganar tamaño. Pero estas facilidades no deben hacer pensar que “tienen barra libre”. Es necesario respetar el equilibrio entre centro urbano y periferia, un marco adecuado de competencia y facilidades para los consumidores.